Traer al mundo a un bebé es difícil, especialmente cuando es un hijo no deseado. A continuación te presentaremos esta conmovedora carta que le escribió una madre a su hija que no esperaba.
"Hoy puedo decir gracias. Gracias a ti, hija, por que me cambiaste en muchos aspectos. Espero tener las herramientas suficientes para construir un nuevo camino donde estemos juntas."
"Se siente algo raro pasar de escribir cartas a mi primer amor, a escribirle una carta a la niña que concebimos y que hoy tengo en mi vientre. El tiempo me ha demostrado que la vida en un segundo te puede cambiar y que el poder de una decisión por más mínimo que sea, puede mover montañas. No me siento orgullosa de todas la decisiones que he tomado pero sí tengo claro que una mala decisión que acarrea tantos sentimientos y emociones encontradas puede cambiar el rumbo de tu vida y no necesariamente para peor, al contrario, te puede llevar a lo más alto de la cima y te puede hacer encontrar un sentido cuando todo está perdido.”
"Cuando supe que estabas dentro de mi, el mundo se alborotó, la mente de esa joven adolescente soñadora se distorsionó y sentí que todo estaba oscuro. En muchos lugares escuchaba que era aceptable tomar la decisión de no tener al bebé e interrumpir el desarrollo, pero mis padres me habían educado con valores y principios que no me permitían realizar ninguna de estas acciones. Se me hacía imposible terminar con algo que la madre naturaleza había puesto en mi camino."
Es maravilloso como el proceso de ser madre comienza desde el primer momento que sabes que estas embarazada. Al principio, comienzas a pensar en las cosas que pueden pasar, el miedo, la soledad. Es inevitable no sentir impotencia al verte hundida en la soledad a pesar de tener muchas personas a tu alrededor diciéndote "no estás sola". Pero, aunque no lo creas hija mía, agradezco a la vida la oportunidad de que solo seamos tu y yo, ya que de ser de otro modo no habría podido encontrarme conmigo misma y mucho menos contigo."
"Después viene la pregunta ¿por qué a mi?, me preguntaba si realmente estaba destinada a esto. Después viene el proceso de aceptación, aunque me costó mucho, era muy difícil dejar de estudiar lo que te apasiona y tener metas, olvidarte de tu plan de vida y comenzar uno totalmente distinto. Me di cuenta de que ya no ere sólo yo, ahora tenía que pensar por ti también. !Es una hija y estará toda la vida junto a ti", pensé. Para antes de aceptar que llevaba conmigo otra vida, primero debí aceptarme a mí misma. Debes quererte, respetarte y amarte, para poder empezar a amar a otra persona. Hoy han pasado nueve meses desde gestación, falta muy poco para terminar este proceso de aceptación, y cada vez siento que te voy amando más a pesar de que no te puedo ver, no puedo imaginar el día en que te tenga en mis brazos."
“Cuando la gente dice que una joven de diecinueve años está apta para concebir un bebé no estoy totalmente de acuerdo, biológicamente quizás sí lo esté, pero por otro lado por muy madura que se sea, aún a mi corta edad son muy pocas las vivencias que me han enseñado lo bueno y lo malo de la vida, aún son pocas las caídas, es poca la lucha y pocos los triunfos, sin embargo eso no quiere decir que tenga poco para entregarte, no quiere decir que seré una mala madre, al contrario, me esforzaré aún más por darte lo mejor, entregarte valores, principios y disciplina como hasta ahora tus abuelos continúan haciéndolo conmigo y de seguro juntas iremos aprendiendo y construyendo este largo camino.”
“Van nueve meses ya que llevo de madre y me he dado cuenta que no hay persona en el mundo que me esté enseñando de la vida más que tú, gracias a ti hoy valoro las palabras de mi madre que antes sólo eran sermones a los cuales muchas veces hacía oídos sordos y ahora tomo nota de ellas para guardarlas siempre en mi; gracias a ti me he dado cuenta que las únicas personas que estarán siempre en las buenas y en las malas contigo será tu familia, que el amor de padre y madre es único e irremplazable por lo que debes considerarlos como tesoros, valorarlos y respetarlos; gracias a ti hija me he dado cuenta que las amigas son pocas, que algunas se van y otras se quedan, y son solo algunas las que están en los momentos que tú consideras más importantes; tú me has enseñado que nunca se termina de conocer a las personas que sobre todo no hay que esperar nada de nadie para evitar sufrimientos y decepciones; gracias a ti me he dado cuenta que la vida es muy corta y que se debe aprovechar y valorar cada momento porque puede que no se presente nunca más, y sobre todo gracias a ti he aprendido lo que creo más importante, contigo aprendí a ser consciente, consciente de la vida y cuánto vale ésta, consciente de mi mente y mi cuerpo, de lo que vale cada parte de mi, consciente de mi alrededor y de cada persona, consciente de mis acciones y decisiones porque son estas las que me definen como persona, e infinitas cosas más que puedo rescatar en tan solo unos pocos meses. Y pensar que aún me queda toda una vida para seguir aprendiendo junto a ti.”
"Si me preguntarán como me siento mejor si ahora o antes que no te´nia más preocupaciones que cumplir con estudios, sin pensarlo respondería que ahora. Hoy me siento mucho más completa y más clara, se que las metas y sueños que tenía no se terminaron, al contrario, sigo más convencida de mis idales y lo mejor de todo es que tengo una nueva compañera de vida que me dará las fuerzas y me impulsara a que siga luchando y saliendo adelante. Mi vida se ha vuelto más interesante, hoy puedo dar gracias a ti hija por cambiarme en todos los sentidos y por poder incultarte lo necesario para que al igual que yo, el día de mañana tu puedes vivir feliz y agradecida por lo que día a día la vida nos da.
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Con información de MentalidadCreativa